El sabado nos fuimos para Cordoba - Nariño, a las fiestas de San Bartolome de Males.
Llego la Jefa Maxima, primero fuimos al resguardo de Ipiales a concertar unas reuniones con los señores regidores, luego de vuelta al hotel y de ahi si nos fuimos para Cordoba.
Nos demoramos mas de lo normal porque ibamos tomando fotos, estaba haciendo sol y el paisaje era maravilloso...Mr. Pepi ya iba desesperado porque cada cinco minutos parabamos.
Pasamos por el puente sobre el rio Guaitara, que esta en los recuerdos de mi infancia, seguro que el Joven Twin the Blue se acuerda, el puente es de madera y esta en una garganta profunda sobre el rio...da vertigo.
Cuando llegamos al pueblo ya todas las calles estaban llenas de gente, otras estaban cerradas...caos total...dejamos el carro cerca de la plaza central, estaba comenzando la misa, asi que nos fuimos hasta la otra plaza para ver donde estaban los castillos de polvora y de paso aprovechamos para comer algo.
Salimos de la panaderia justo antes de que comenzara la misa, el tiempo justo para comprar un video sobre el santo patrono, averiguar por donde sale la prosecion e identificar a los polvoreros...nadie quiere quedar entre dos cadenas de papas.
Sale el cura (que segun informaciones de las señoras del pueblo es un cobarde al que no le gusta la polvora, que la iba a prohibir, pero que los transportistas se le pararon en sus 15 y le dijeron que la plata la ponen ellos y que si no habia polvora no habia fiesta...vox populi, vox dei...la fiesta se hace!!! para mi que este debe ser seguidor del obispo de Ipiales, que es igual o mas pendejo) con sombrilla, detras el santo, la banda los feligureses....y cubrase quien pueda...porque comienzan a explotar las cadenas de papas.
El "pa pa pa, parara pa pa" casi no se escucha por las explosiones y casi no se ve nada por el humo...la prosecion avanza hasta la otra plaza (donde esta la tarima de las bandas y los castillos de polvora), baja una calle y vuelve hacia la iglesia...o bueno, eso creemos nosotros, porque sigue de nuevo hasta la otra plaza (cuando los feligreses se entretienen el cura aprovecha y se escapa hacia la casa cural).
En la otra plaza ya estan listas las bandas que comienzan a tocar mientras se quema el primer castillo, los de la alcaldia echan globos, ademas del castillo queman mas polvora, los asistentes ofrecen aguardiente, whisky, chicha y chapil.
Yo, encantada, me fascina la polvora, aunque ya me dolian los oidos por las explosiones de las papas, mas alla del significado del santo para la gente del pueblo me encantan las fiestas y me parece el colmo que las quieran acabar para instaurar los retiros espirituales, sea cual sea la excusa de la fiesta nadie deberia meterse con la manera de celebrar de los pueblos.
Despues de que a la prima Bernie le cayera una chispa en el ojo nos fuimos a Ipiales, recansados, pero super contentos...bueno, por lo menos yo iba super feliz! fue bonito volver a Cordoba.
Llego la Jefa Maxima, primero fuimos al resguardo de Ipiales a concertar unas reuniones con los señores regidores, luego de vuelta al hotel y de ahi si nos fuimos para Cordoba.
Nos demoramos mas de lo normal porque ibamos tomando fotos, estaba haciendo sol y el paisaje era maravilloso...Mr. Pepi ya iba desesperado porque cada cinco minutos parabamos.
Pasamos por el puente sobre el rio Guaitara, que esta en los recuerdos de mi infancia, seguro que el Joven Twin the Blue se acuerda, el puente es de madera y esta en una garganta profunda sobre el rio...da vertigo.
Cuando llegamos al pueblo ya todas las calles estaban llenas de gente, otras estaban cerradas...caos total...dejamos el carro cerca de la plaza central, estaba comenzando la misa, asi que nos fuimos hasta la otra plaza para ver donde estaban los castillos de polvora y de paso aprovechamos para comer algo.
Salimos de la panaderia justo antes de que comenzara la misa, el tiempo justo para comprar un video sobre el santo patrono, averiguar por donde sale la prosecion e identificar a los polvoreros...nadie quiere quedar entre dos cadenas de papas.
Sale el cura (que segun informaciones de las señoras del pueblo es un cobarde al que no le gusta la polvora, que la iba a prohibir, pero que los transportistas se le pararon en sus 15 y le dijeron que la plata la ponen ellos y que si no habia polvora no habia fiesta...vox populi, vox dei...la fiesta se hace!!! para mi que este debe ser seguidor del obispo de Ipiales, que es igual o mas pendejo) con sombrilla, detras el santo, la banda los feligureses....y cubrase quien pueda...porque comienzan a explotar las cadenas de papas.
El "pa pa pa, parara pa pa" casi no se escucha por las explosiones y casi no se ve nada por el humo...la prosecion avanza hasta la otra plaza (donde esta la tarima de las bandas y los castillos de polvora), baja una calle y vuelve hacia la iglesia...o bueno, eso creemos nosotros, porque sigue de nuevo hasta la otra plaza (cuando los feligreses se entretienen el cura aprovecha y se escapa hacia la casa cural).
En la otra plaza ya estan listas las bandas que comienzan a tocar mientras se quema el primer castillo, los de la alcaldia echan globos, ademas del castillo queman mas polvora, los asistentes ofrecen aguardiente, whisky, chicha y chapil.
Yo, encantada, me fascina la polvora, aunque ya me dolian los oidos por las explosiones de las papas, mas alla del significado del santo para la gente del pueblo me encantan las fiestas y me parece el colmo que las quieran acabar para instaurar los retiros espirituales, sea cual sea la excusa de la fiesta nadie deberia meterse con la manera de celebrar de los pueblos.
Despues de que a la prima Bernie le cayera una chispa en el ojo nos fuimos a Ipiales, recansados, pero super contentos...bueno, por lo menos yo iba super feliz! fue bonito volver a Cordoba.
Dato curioso: San Bartolome es liberal, digo no es mero adorno que sus ropas sean rojas, de verdad es liberal.
Las fotos son mias y de Diana Pastas...y ya saben, al que las copie le cae la maldicion de El Cueche.
Las fotos son mias y de Diana Pastas...y ya saben, al que las copie le cae la maldicion de El Cueche.
2 comentarios :
Pues valió la pena la espera...
ojalá algún día pueda irme de correrías con sumercé por uno de esos pueblos.
saludos prima!
Me encantó! Muy ilustrativo, narrativo y descriptivo; qué bueno leerla a estas horas de la noche srta. Madame... no soy amante de la pólvora, pero qué carajos, fiesta que no la tenga no es fiesta.
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