Como parte de mi voluntariado en Inclusión Digital cubrí un taller de robótica para adultos ofrecido a profesores de colegios públicos y privados, dictado por la gente de Maloka, en la cual les enseñaban el uso de un robot polilla.
Los profesores estaban un poco temerosos de dañar algunos de los materiales que les facilitaron para hacer un primer circuito, alguna de las profesoras dijo que se estaba alistando para el incendio, mientras se quitaba la chaqueta y ponía mas interés en los materiales de la mesa.
Luego de hacer funcionar este primer circuito, muy sencillo montado en una protoboard, comentaron sobre en que mejoraría la vida diaria el uso de foto resistencias e inmediatamente después a cada grupo se les entrego un robot polilla para que miraran como funcionaba.
Tenían que llenar en una guia que movimientos hacia el robot con cada uno de los programas que vienen precargados en el robot.
Los talleristas traen una pista de retos hacia el frente y le asignan un reto a cada uno de los grupos de trabajo, ellos tendrán cerca de un minuto para discutir cual es el mejor programa del robot para superar el reto.
Fue muy grato ver a los profesores cambiando su rol de maestros por el de aprendices, sentados en el piso y experimentando con sus robots, las risas, los gritos de jubilo, las caras de preocupación cuando no funcionaba debidamente el robot llenaron el ambiente y le dieron un toque de intimidad al taller.
No todos los robots funcionaron como debían, los mismos profesores lo dijeron - en la practica algo siempre sale mal - al final devolvieron los robots porque ya se estaban quedando sin batería, pero aunque no me lo crean, ellos querían seguir jugando con las polillas.
Para finalizar la parte practica del taller les preguntan que posibles usos tendrían en la vida practica las funcionalidades que observaron en el robot; las respuestas van desde palos para ciegos hasta robots de rescate.
Manuel Franco Avellaneda hizo un recuento de los pasos y de las actividades que había tenido el taller, definió tres momentos importantes dentro de todo el proceso:
Luego de hacer funcionar este primer circuito, muy sencillo montado en una protoboard, comentaron sobre en que mejoraría la vida diaria el uso de foto resistencias e inmediatamente después a cada grupo se les entrego un robot polilla para que miraran como funcionaba.
Tenían que llenar en una guia que movimientos hacia el robot con cada uno de los programas que vienen precargados en el robot.
Los talleristas traen una pista de retos hacia el frente y le asignan un reto a cada uno de los grupos de trabajo, ellos tendrán cerca de un minuto para discutir cual es el mejor programa del robot para superar el reto.
Fue muy grato ver a los profesores cambiando su rol de maestros por el de aprendices, sentados en el piso y experimentando con sus robots, las risas, los gritos de jubilo, las caras de preocupación cuando no funcionaba debidamente el robot llenaron el ambiente y le dieron un toque de intimidad al taller.
No todos los robots funcionaron como debían, los mismos profesores lo dijeron - en la practica algo siempre sale mal - al final devolvieron los robots porque ya se estaban quedando sin batería, pero aunque no me lo crean, ellos querían seguir jugando con las polillas.
Para finalizar la parte practica del taller les preguntan que posibles usos tendrían en la vida practica las funcionalidades que observaron en el robot; las respuestas van desde palos para ciegos hasta robots de rescate.
Manuel Franco Avellaneda hizo un recuento de los pasos y de las actividades que había tenido el taller, definió tres momentos importantes dentro de todo el proceso:
- Motivación
- Experimentación
- Reflexión y cierre
Les contó a los profes que la idea del taller había nacido desde las mismas inquietudes y aproximaciones de los niños que asisten a Maloka sobre la robótica, que ellos no necesitan un robot polilla para motivar a sus estudiantes y concluyo con una frase que me pareció hermosa.
A cuantos de los niños con los cuales tenemos contacto estamos tarando y metiéndoles en la cabeza eso que nosotros llamamos brecha tecnológica? Cuando sera que vamos a aceptar y superar nuestros miedos en cuanto a lo innovador? Lo nuevo no es malo, tan solo nos da pavor lo desconocido y el miedo al ridículo."El niño es un conocedor tecnológico"
3 comentarios :
que bonito, la robótica es el futuro, aunque a nadie le guste la idea
Por fin veo un post del cparty de algo distinto a los blogs. No se si es por que los blogs solo hablan de blogs o por que realmente lo otro no es tan movido.
Sinceramente y como Ingeniero Electrónico estos temas son los que mas envidia me están dando de no estar por allá...
Visita la nueva página de Robótica para niños en www.educaredcolombia.com/mundorobotica
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